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BENEMÉRITA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE PUEBLA
50  AÑOS  DE MÉDICO
DISCURSO

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Por el Dr. Jaime Cervantes Pérez

 

 

Honorable Presidium, estimados amigos.

Doy las gracias a quienes hicieron posible esta celebración.

Doy  gracias a las fuerzas que nos dieron la vida y la oportunidad de que hubiéramos convivido en la facultad de Medicina.

Doy gracias a la  universidad que educó a mis maestros, a nosotros y que lo haga con las generaciones futuras.

La universidad me enseño a seguir luchando; después de estar tan cansado de luchar.

A distinguir la realidad de la ficción.

A ser honrado conmigo mismo.

A estudiar visualizando.

Me  dolía cuando a algún compañero lo reprobaban.

He dicho en otros países que todo lo que yo he escrito me lo enseñó mi Universidad

Mi libro de la historia del béisbol de USA, Mexico y Puebla, me hicieron el favor de publicarlo aquí en la Universidad, siendo secretario general el Lic. Víctor Espíndola.

Tuvimos muchísimas anécdotas deportivas y académicas, pero no da tiempo hablar de tanto, solamente me voy a referir a dos que trascendieron entre nosotros:

En el parque de béisbol me encontré al Dr. Efrén Gómez Ballesteros quien con cara de nostalgia me dijo, ¿Por qué no escribes algo de Marthita Mijares? Y se me quedó grabado y hasta ahora hubo la oportunidad de recordar y escribir algo breve.

 

BAILE Y CORONACIÓN DE MARTHITA MIJARES

Cuando llegamos al tercer año de Medicina en 1955, había un maestro el Dr. Luis Antonio Larrazabal, muy bueno dando su cátedra de Patología Quirúrgica. En el año 1954, él había ido a Costa Rica y Nicaragua llevando alumnos de una generación anterior a la nuestra, en ese viaje y en esos países se le acercaron padres de familia, preguntándole si él podría intervenir para que sus hijos vinieran a estudiar a Puebla, les dijo que si, vino, habló con el Rector en turno y aceptó que vinieran.

Por entonces la planta de maestros era muy buena, de lo mejor de la República y vinieron muchos alumnos a los que les llamábamos ticos y nicas, entre ellos gente extraordinaria para los deportes, después llegó gente de Venezuela. Muchos de estos alumnos se regresaron a su patria y fueron gente muy renombrada en sus respectivos países.

Hace un año me invitó la Federación Argentina de Béisbol a dar una conferencia de Psicología en el Béisbol.

Algunos de estos ticos, nicas y venezolanos, fueron a terminar la carrera de Medicina en la universidad Nacional de Córdoba Argentina donde enseñaron este deporte. Me hablaron muy bien de la Universidad Autónoma de Puebla.

Este maestro Larrazabal, tenía ganas de llevarnos a Europa y organizamos una rifa para sacar fondos, no recuerdo si dos o tres coches y más premios, los boletos fuimos a ofrecerlos sobre todo en las fábricas textiles, el Dr. Rodolfo Barrios el Dr. Jaime Gómez, y yo viajamos a venderlos hasta Córdoba y Orizaba, donde les hice bromas pesadas.

Por entonces efectuamos dos festivales para recabar fondos, uno en el Teatro Principal y otro en el Toreo de Puebla; se contrataron artistas de cine, radio y televisión, entre ellos a Marthita Mijares, que estaba muy bonita.

A ella le caímos bien todo el grupo y el maestro tuvo gran amistad con ella, ideamos organizar un baile y se lo planteamos al maestro quien aceptó, pues andábamos muy enamorados, el Dr. Centeno de Lupita Rugarcía y yo de Marthita Martínez, que fueron las princesas, coronamos a  Marthita y a sus princesas en el Club de Leones junto al Colegio Lafragua, de mucha gala, con las mejores niñas de la sociedad de Puebla. Hubo cosas que no se pueden contar.

La organización estuvo estupenda, todavía hace algunos años publicaron en el Sol de Puebla remembranzas de eso, dentro de esta historia hay muchas cosas chuscas, como cuando al Presidente del grupo, el Dr. Maurilio Flores quería ser el chambelán de Marthita y dar el elogio lírico, nosotros le dijimos que si.

Habíamos mandado hacer los smokings a cuenta del grupo a una sastrería enfrente de la Biblioteca Lafragua y a las 5:00 de la tarde del día de la coronación quedamos que se recogerían.

Cuando Maurilio fue a recoger su traje, éste ya había sido recogido y no pudo ser el chambelán de Marthita Mijares, ni darle el elogio; y entró el emergente, Dr. Jaime Gómez Jiménez.

Otra anécdota, el Dr. Larrazabal para organizar el baile, me  prestaba del diario su coche nuevecito; el Dr. Centeno para lucirse con la hermana del Lic. Alfonso Díaz, me dijo que quería manejarlo enfrente de la casa de esta señorita, solo que al dar la vuelta se le olvido enderezarlo y se fue a meter con todo y el coche en el zaguán donde vivía ella.

Sentí que todo se me obscurecía, salí, lo vi y el radiador estaba roto, salía mucha agua y todo aplastado enfrente, Centeno me dijo:

El maestro te lo prestó a ti y va a decir que eres un irresponsable y yo te veo como hermano así que es mejor que le digas que tuviste un accidente.

Yo sólo meneaba la cabeza y a duras penas acepté su propuesta e hizo que yo me echara la culpa.

Hay más anécdotas de las que sólo sabemos él y yo, siempre que me acuerdo y me da mucha risa.

Acerca de estos festejos y rifas llegó todo esto a oídos del Rector quien pensando que el examen final de Patología Quirúrgica era una farsa, porque cavilaban que el Dr. Larrazabal nos iba a pasar a todos; mandaron sinodales especiales, entre ellos, me acuerdo del Dr. Roberto León, pero les diré que el grupo era muy parejo, grandes estudiantes y muy inteligentes todos.

Llegamos al examen final muy bien preparados, yo recuerdo que el que sacó 10 era el Dr. José Aguilar, que fue uno de los grandes alumnos que tuvo la Escuela de Medicina.

Como después hubo problemas dentro del grupo, ya no pudimos hacer el viaje a Europa, el Dr. Larrazabal nos repartió las ganancias de acuerdo con los boletos que habíamos vendido para la rifa, habíamos dos o tres que vendimos muchos boletos; les diré que el Dr. José Aguilar se fue para Cuba y como a mí me gustaba mucho la ropa, todo se me fue en trajes.

 

AUTONOMÍA UNIVERSITARIA

SECUNDARIA VENUSTIANO CARRANZA

Desde la Secundaria Venustiano Carranza, tuve gran amistad con el Dr. Francisco Arellano y con su mamá, ellos vivían a dos calles de esta Secundaria.

En la Secundaria él puso una tiendita de útiles; así como también montó la obra de teatro “Anita la Huerfanita” e hizo la revista “Numen” su hermano el Ing. Rafael Arellano iba mucho a visitarnos.

El Dr. Arellano siempre fue un líder natural, fue Presidente de grupos, de la Secundaria, de la Preparatoria en la cual empezó a destacar pues era un buen estudiante, honrado, inteligente, buen orador tenía mucha facilidad de palabra y conocimientos para decir las cosas, sacó varias veces la Flor de Oro en el Teatro Guerrero que actualmente es el Teatro de la Ciudad en el portal junto a la Presidencia Municipal. Competía con todos los grandes oradores de Puebla de esa época, como el Lic. Guillermo Pacheco Pulido.

 

PREPARATORIA DE LA UAP

En la Preparatoria entablamos amistad con el Dr. Abraham Ruiz, quien nos daba Biología en segundo año, y nos citaba en su consultorio de la 2 Norte y 12 Poniente, ahí conocimos al Dr. Julio Glokner quien era dicharachero, bromista, famoso porque cualquier estudiante que tuviera enfermedades venéreas acudía a él y no cobraba la consulta, jugaba básquetbol en el gimnasio al fondo de la Universidad.

El Dr. Glokner nos dio a conocer con el profesor Esteban González, Director de la Secundaria Nocturna Flores Magón con el Prof. Enrique Aguirre, con el  Prof. Héctor Silva Andraca, el Prof. Antonio Esparza

Entonces fue cuando yo empecé a oír de la imposición del Gobierno en la Universidad, de su intromisión, y querían que la Universidad tuviera un Consejo que eligiera autoridades.

Estos maestros influyeron en los alumnos para que no admitieran las clases de Inglés e hicieron que los profesores de esta materia se cansaran de recibir improperios, como a Nathan Lubitz y otros, hubo alumnos que, quemaban plástico en las clases para que no tuviéramos esas enseñanzas, por entonces también se fundó la Biblioteca Benjamín Franklin, subsidiada por la Embajada Americana, que estaba junto a la Biblioteca Lafragua, eso también socavó la intolerancia del grupo de izquierda.

 

ESCUELA DE MEDICINA

Cuando llegamos a segundo año de Medicina nos pusieron de profesor al Dr. San Martín, quien nos puso como libro de texto al Houssey, que fue el primer libro que me causó gran impacto, pues yo pensaba que lo máximo de ciencia estaba en USA y sin embargo este estaba editado en Argentina y lo usaba el Dr. San Martín que venía de haberse especializado en Estados Unidos.

No se por qué razones nuestro grupo también empezó a protestar en contra  de este doctor, que consultaba en el Hospital Latino Americano protegido de William O. Jenkins y salió expulsado de la Facultad.

Inmediatamente entró el Dr. Glokner en su lugar y respiramos, pues la clase con el Dr. San Martín yo la veía muy difícil en cambio con el Dr. Glokner la vi muy accesible para aprobar la materia.

En 1954, un acto que enardeció a la Izquierda de la Universidad fue el nombramiento del Dr. Rafael Artasánchez Romero, como Rector de la UAP.

Artasánchez era protegido del Sr. William O. Jenkins, quien tenía mucho poder en el Gobierno del Estado y que después lo hizo presidente Municipal.

Con lo que se veía una vez más el dedazo del Gobernador Rafael Ávila Camacho, hermano del Gral. Maximino Ávila Camacho que causó furor en la política de Mexico. Y hermano del ex presidente Manuel Ávila Camacho.

En las elecciones del Gral. Almazán y Manuel Ávila Camacho hubo muchos balazos yo fui testigo de esas  elecciones; así que sabíamos como manejaban las cosas la familia Camacho.

En este mismo año, el Director de la Facultad de Medicina fue el Dr. Manuel S. Santillana, que era Caballero de Colón y a fines de 1956 llego a la Rectoría  de la Universidad después de haberla dejado el Dr. Rafael Artasánchez Romero.

Toda la izquierda de la universidad estaba muy enojada y en contra de la política americana  y la guerra fría en todo su apogeo.

 

De la Autonomía; la ideología izquierdista había hablado  previamente con el Dr. Jaime Paredes en 1954, cuando era presidente de la FEP.

En 1955, también se había hablado con el Dr. Antonio ¿Rodríguez? “El Barón” también Presidente de la Federación Estudiantil Poblana en 1955.

 

Pero sólo se cristalizaron estas aspiraciones de la Autonomía, cuando llegó el Dr. Francisco Arellano a la FEP en 1956.

Desde 1955, pensábamos que el abocado para ser el presidente de FEP durante 1956 era el Dr. Arellano.

Cuando lo elegimos nadie se opuso, todo el grupo lo apoyó.

Se llegó el momento para dar a conocer su planilla de la FEP se discutieron varios nombres para la Secretaría General, pero el más viable en jalar con nosotros lo fue el Lic. J. Manuel González Salgado fuimos y hablamos con el entonces estudiante para que apoyara a la planilla de Arellano, quien aceptó.

Entonces ya teníamos un apoyo dentro de la Universidad pues les diré que la Escuela de Medicina era la preponderante en toda la Universidad ahí se hacía todo lo que la Escuela de Medicina decía, era muy fuerte, éramos los protagonistas de la Universidad. Se nombraron más representantes en las otras facultades para la planilla como el Lic. Alberto Briones Rodríguez, El Dr. Arturo Santillana, C.P. Gilberto Montes González, el Lic. José Díaz Limón, Dr. Salvador Ibarra, Prof. Irán Huerta Karlock y muchos más. Quedamos fuertes, cimentados y ganamos la FEP.

 

Por entonces había gran amistad del Dr. Arellano con el Ing. Rivera Terrazas y se casó con la cuñada de él, así que el Ingeniero influyó también demasiado en el movimiento.

Por entonces se agudizó la corriente de la derecha por el control de la Universidad, entonces llamados FUAS, pero como Medicina era muy fuerte logramos someterlos y había enfrentamientos directos e íbamos toda Medicina al Tercer Patio del Carolino que es en donde estaba Ingeniería, casa de este grupo y a veces no bajaban de sus aulas al patio.

 

El Dr. Artasánchez que era de derecha, e incondicional del Gobernador, no tuvo más remedio que andar de la mano con Arellano durante los últimos meses previos a la declaración de la autonomía.

 

Pero les diré a ustedes que el Dr. Manuel S. Santillana y el Dr. Rafael Artasánchez Romero, siendo de derecha, los dos fueron excelentes maestros, excelentes médicos y excelentes amigos. Pero la ideología imperante en la Universidad les hizo separarse de la izquierda totalmente.

 

Por estos años y dentro de la lucha de la Autonomía, Francisco estableció muchos contactos, entre ellos con el Lic. Mario Moya Palencia, que estaba en la UNAM, después fue Secretario de Gobernación durante el Gobierno de Echeverría, este Licenciado quería mucho a Francisco y por los años 70’s se visitaban frecuentemente.

 

Alrededor del mes de septiembre se hacía el baile de la Federación y que nos tocó organizar, andábamos todos sumamente ocupados y se coronó a la Srita. Coco Álvarez Gardea, se hizo la coronación en el cine Reforma, por entonces venia a dar el elogio Lírico el Poeta Carlos Pellicer una gran persona.

Cuando se fue Francisco para Morelia, al Dr. Centeno y a mi nos dijo, me voy a Morelia a buscar apoyo, quédense ustedes, háganse cargo de la coronación y de Don Carlos Pellicer, así lo hicimos.

 

Por esos días a Francisco y a mí nos pararon tres veces en el zócalo y nos decían que dejáramos las cosas por la paz, que nos retiráramos del proyecto de la autonomía.

Arellano y yo somos gente que los demás no nos intimidan, porque sabíamos que lo correcto era hacer la autonomía, no sabemos si esto haya venido del Gobernador Rafael Ávila Camacho o de la Rectoría y en muchas ocasiones lo acompañábamos hasta su casa, por la Cruz Roja y hasta que entraba nos íbamos nosotros.

Quienes se dieron cuenta de todo esto, fue su hermano el Ing. Rafael Arellano, lo comentamos hace unos días.

Ya sabíamos qué clase de personas eran los Ávila Camacho, sabíamos lo que había sido Don Maximino en Puebla, donde hay mucha historia que decir todavía, cuando se murió Don Maximino en Atlixco, el Dr. Ramón Moreno, mi tío, era Médico Legista y se encargó de examinar su cadáver, de esto hay mucho de que hablar.

El Lic. Armando Romano Moreno, que era mi tío anduvo luchando para  que al nombre de Universidad de Puebla se le agregara el nombre de BENEMÉRITA.

Indudablemente que entre el gobernador y el maestro Artasánchez, tuvieron muchas pláticas, pues este tenía muchas presiones en la Universidad con los hermanos Hermoso quienes hacían sus juntas en el Salón de Proyecciones del primer patio y en las cuales pedían al Dr. Artazanches que renunciara.

Cuando el Dr. Artazanches y el gobernador vieron que ya no era posible evitar la Autonomía de la Universidad, el Gobernador citó en Teziutlán a Arellano y llegando allá el gobernador les dijo que los esperaba al día siguiente en Casitas, Ver, le dio la dirección:

El Gobernador, se encontraba relajándose en la playa, resguardado por sus guardaespaldas y al entrar a verlo Francisco Arellano, el Gobernador en ese lugar le dijo:

-Qué bueno que vino

Dirigiéndose a los guardaespaldas les señaló:

-Déjenme solo no hay problema.

Se salieron estos y el Gobernador dirigiéndose a Francisco le dijo:

-Mire Arellano nada más porque me ha demostrado que tiene usted huevotes yo lo voy a ayudar, así que váyase usted tranquilo.

Arellano le dio las gracias y con un aire de alivio dejó Casitas, Veracruz.

Y desde ahí se suavizó la situación, comenzaron las pláticas y lo ayudó hasta la Autonomía.

Pancho platicaba esto con mucha satisfacción y decía:

-Esto tuvo muchos problemas, pero mis compañeros de generación me ayudaron.

Cuando la derecha vio que era inminente la autonomía el Comité Pro Autonomía Universitaria, organismo vinculado al Frente Universitario Anticomunista (FUA), trataron de apropiarse del moviendo y presentaron proyectos, que fueron rechazados.

El 6 de septiembre de 1956, el Consejo Universitario, encabezado por el Rector Rafael Artasánchez Romero, discutió un proyecto de Ley para obtener la Autonomía Universitaria

 

El 21 y el 22 de noviembre la Cámara de Diputados sesionó y aprobó el proyecto que, concedía una autonomía restringida, que se publico en el Periódico Oficial del Gobierno Constitucional del Estado Libre y Soberano de Puebla del 23 de noviembre de 1956, mediante el cual se otorgaba la Autonomía a la Universidad de Puebla

 

Había una placa metálica en la Universidad sobre esta Autonomía, que desgraciadamente la quitaron, la destruyeron o la fundieron con ese movimiento del 62 y nunca la volvieron a poner.

En la casa de los muñecos en donde está actualmente el Museo Universitario en la 2 Norte, existe la historia de la Universidad pero de la Autonomía no se dice nada. Debía de escribirse algo, del por qué se hizo y la lucha tan tremenda entre la izquierda y la derecha que aún persiste.

Mucha gente de esta disputa ha muerto, y los que vivimos nos encontramos ya cansados y no queremos saber más de esto.

Por esos años mis padres decidieron casarse en la Catedral y el Dr. Arellano fue el padrino.

Yo les invito a todo el grupo y sus familias a un viaje a Rusia,  con gastos pagados, cuando celebremos 100 años de haber salido de la Escuela de Medicina.

 

Estimado Sr. Rector, soy miembro del Comité Elector del Salón de la Fama de Monterrey, hace unos meses se efectuó la entronización y me obsequiaron esto.

A nombre del grupo y mío, reciba este obsequio con valor afectivo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Sr. Rafael Arellano y Dr. Jaime Cervantes Pérez

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

PUEBLA, PUE., 20 DE SEPTIEMBRE DE 2008

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